La gran estafa
El elefanticida monarca que nos encasquetó Franco enmascarado mediante un referéndum constitucional, se aferra a su privilegiado estatus con la anuencia de la merecidamente denostada casta política. Mientras su heredero implora porque la pestilencia de la Casa Real no acabe por ser tan insoportable que dé al traste con la familia borbona en la Jefatura del Estado, el yerno "me lo llevo" y la autista infanta esposísima Cristina se las ingenian para aparentar que no tienen lo que tienen: un fortunón y muy poca vergüenza. Al estercolero monárquico hispano le está viniendo de perilla la maldita crisis. Esa gran mayoría de la sociedad a la que el desempleo y las dificultades económicas traen de cabeza no está en condiciones de afrontar ahora algo que, tarde o temprano será inevitable. Puede que Felipe VI llegue a reinar, lo que no parece tan posible es que lo haga, de por vida, simultáneamente como jefe de Estado. Eso sucederá porque no es sostenible la conciliación de unos d